Carrera de Orientación

Hoy nos han invitado a una actividad divertidísima, una «Carrera de orientación». En un parque de Móstoles hay escondidas una serie de balizas que tienes que encontrar en el menor tiempo posible. El organizador de todo ha sido Jose, el hermano de Patricia y aquí estamos todos listos para la búsqueda, de izquierda a derecha: Mario, Mariano, Isa, Jose, Sandra, Patricia y Javi. Nos organizamos en tres equipos y Jose de juez, ya que él había revisado todas las balizas y sabía donde estaban.

Tuvimos unos minutos para copiar el mapa, ya que en un principio se nos dio un mapa sin los puntos y teníamos que copiar donde estaban las balizas. Estaba todo muy bien preparado, tengo que reconocer la gran labor de organización que ha tenido.

Se copia en el mapa donde están las balizas y se nos da una ficha donde poner cada una de las balizas con la clave que tienen, para saber que se ha pasado por ellas.

Los equipos salimos con cince minutos de diferencia y cada uno en una dirección, para no encontrarnos y darnos pistas. El parque es muy grande, pero es fácil encontrarse, por que todos vamos a los mismos sitios.

Todas las balizas son iguales, un cuadrado con la mitad roja y la mitad blanca y en cada una de las partes unos números o letras, que era lo que teníamos que copiar, pero había que tener cuidado por que había otras balizas similares que NO eran las que nosotros teníamos que copiar, tenías que asegurarte que habías copiado bien el mapa para que supieras exactamente de que baliza se trataba. Teníamos una pista además para cada baliza «arbol», «tunel», etc para no volvemos locos.

El parque es muy grande, por lo que se tardaba de baliza en baliza y algunas estaban muy escondidas, en una de ellas Javi y yo hemos estado a punto de desistir por que creímos que estaba a un lado del rio y resultó estar al otro lado y tras perder un montón de tiempo en una orilla la vimos en la otra y tuvimos que salir corriendo.

El juego es tanto por número de balizas encontradas como por tiempo, se apunta la hora de salida y la de llegada para ver quien lo ha hecho mejor en caso de empate a balizas. El parque es una preciosidad, así que además de jugar, la verdad es que hemos visto un sitio muy bonito, que de otro modo dudo que hubiésemos conocido. Algunas balizas eran muy puñeteras, mira esta en la parte más cercana del puente.

Esta es la más difícil de todas, la «Alberca» por que estaba no sólo fuera del parque, sino que además lejos y aislada. Así que nos ha costado dar con ella.

Eran un total de 13 balizas y las había en todos sitios: Dentro de un tunel, en un árbol, en una alcantarilla, en una fuente, en un pieda, en un muro….

Esta otra de las difíciles, que estaba en la parte interior de un puente ferroviario derruido. Cuando por fin las encontrabas te daba una subida de Adrenalina total.

Ha sido divertidísimo, por que tanto a Javi como a mi nos gustan los juegos y nos lo hemos tomado muy en serio, buscábamos las balizas como si nos fuese la vida en ello.
Al final los tres grupos hemos encontrado todas las balizas, pero nosotros lo hemos hecho en el menor tiempo ¡Por lo que hemos sido los ganadores del juego!
Y hemos tenido hasta premio, una bola del mundo chulísima que me voy a poner en mi mesa de la oficina, por que nos hemos ganado el título de «exploradores».

Como se trataba de divertirnos, no de ganar nada, ha habido un premio para el equipo más lento, que han sido Mario y Sandra, por que les engañaron las balizas falsas que había y no las copiaron todas bien, así que les ha tocado un puzzle para niños de la Unión Europea 🙂

Acompañado de frijoles, arroz blanco, ensalada, patatas fritas y plátano frito. Aunque lo mejor es la carne, que como todo somos muy carnívoros ha sido la elección perfecta.

Ha sido un día divertidísimo, el juego ha estado genial organizado, hasta el tiempo nos ha querido dar el tiempo perfecto para el juego. Y además hemos conocido a los amigos de Patricia que son majísimos.