Comida y Playa

Hoy hemos querido darle un toque más serio al día, les habíamos prometido que les íbamos a invitar dos días a comer, uno a nivel profesional y otro a nivel personal. A nivel profesional por que gracias al trabajo con Antonio y Rocio, que como ya sabes son socios de Gifmania en desarrollos de programación para nosotros, hemos mejorado nuestra situación, con la perspectiva de que la crisis actual no nos afecte mucho y con buenas perspectivas en el futuro, que sin ellos seguramente no serían tan buenas. Les debemos mucho también en la constante búsqueda de soluciones que nos dan a nuestros problemas. Gracias a ellos hemos ganado en cantidad y calidad de nuestro trabajo y aunque les hemos dado muchas veces las gracias, hoy queríamos dárselas de un modo especial, llevándoles a un sitio que nos gusta mucho a comer, se trata de «Fuegovivo«, un restaurante brasileño que es de lo mejor de Miami.

Es un sitio para comer mucho y bien y con un servicio de primera categoría. La comida ha sido deliciosa, por todo, hemos tenido un camarero que estaba fascinado con que fuésemos españoles y el buen hombre se ha pasado todo el rato preguntándonos cosas sobre las costumbres de nuestro país, pero no ha dejado ni un solo detalle en el servicio, al contrario, nos ha cuidado como no te imaginas, como hace tiempo que no me sentía yo en una mesa. El sistema de la comida es lo que se llama rodicio, empieza con un buffet de platos frios, ensaladas y entrantes frios de toda clase, con una calidad excelente y muchísima variedad. Después empiezan las espadas, cortes de carne que te traen a la mesa y si quieres te los van sirviendo todo el tiempo que quieras y la cantidad que quieras, a cada momento pasan con un corte de carne diferente para que los pruebes todos. Tienes una tarjeta que por un lado es verde y por la otra roja, si la pones con la cara verde para arriba los camareros (todos brasileños, vestidos de «vaqueros«) siguen trayéndote más cortes de carne, si la pones con la cara roja no se paran, así descansas o cuando hayas terminado. Ha sido un verdadero festín, regado hoy con un vino de California, mirando la carta de vinos he visto que tenían un vino de agricultura ecológica y me ha llamado la atención, partiendo de la base de que un vino americano jamás será tan bueno como uno español, estaba muy bien. Hemos salido todos con una cara de felicidad difícil de explicar, saciados en el estómago y en el ánimo, con la seguridad de haber tenido una gran experiencia.

Y para reposar tal comilona, que hasta Rocio que no come ternera le ha encantado, nos hemos ido a la playa, nos hemos bañado como unos valiente aunque estaba la bandera de que había tiburones, así que no nos hemos alejado de la orilla y con un ojo puesto en el agua. Que por cierto, hoy teníamos un «Vigilante de la Playa» que se parecía de verdad en algo a «Los Vigilantes de la Playa»…

En todo momento han estado pasando helicópteros y avionetas con sensores que controlan si se acercan realmente a la orilla, pero por si acaso como saben que ahora están por aquí han puesto la bandera. De hecho hemos sido testigos de un «rescate», un nadador, un chico joven se ha metido en el agua y se ve que ha perdido la noción de la distancia y se ha alejado mucho, han tenido que tirarse dos socorristas a sacarlo del agua por que estaba lejos, imagino que empujado por las corrientes. Con lo melodramáticos que son los americanos para todo, con el vehículo de rescate, los quads de seguridad, dos socorristas para sacar a un chico daba la sensación de ser algo muy gordo para lo que luego ha sido. De todos modos en toda la tarde no hemos visto ni una aleta de tiburón, ni se ha oido jaleo de que se haya visto alguno en alguna parte de la playa, así que imagino que lo ponen por seguridad, pero que tampoco es para asustarse. Nosotros de todos modos, somos chicos prudentes y si ponen la bandera de tiburones, nosotros como los niños chicos, a jugar a la orilla.

Y hablado de jugar, te va a sorprender ¿Pero sabías que yo nunca he jugado a las palas en la playa? No sé, nunca había surgido la oportunidad y Javi compró unas en Almeria y nos las hemos traido y por fin las hemos estrenado. Antonio ha sido el campeón, por que ha jugado contra todos y nos ha ganado a todos. No he tenido precisamente la «suerte del principiante». Pero nos lo hemos pasado muy bien. Nos pasamos el día corriendo para que se vayan de la ciudad con una visión muy completa que no nos dejemos nada importante por ver y de vez en cuando necesitamos un momento de relax como este para retomar fuerzas.

Y tras esta ristra de fotos tan «deportivas» que he hecho, que hay que saber hacer toda clase de fotos. Te dejo con algunas fotos de la playa: