El otro día te comenté que teníamos un día «libre» en el viaje, sin asignar a ningún hotel, que veríamos sobre la marcha a donde íbamos a parar. Al final empezamos a mirar hoteles de Wyndham y optamos por no pasar la noche en
Georgia, como teníamos más o menos en mente y llegar a
Florida, para conocer un sitio que teníamos mucha curiosidad.

Y hemos llegado a Daytona, una de las playas más famosas del mundo, que no tiene nada que ver con la arena, los bañistas, los vigilantes de la playa ni los surfistas, sino que como estarás pensando es famosa por las carreras de coches.

Daytona no es una gran ciudad, es una isla alargada, muy parecida a
Miami Beach y luego una parte continental, pero todo es la misma ciudad, unida por muchos puentes. Es una ciudad moderna, eso si y sobre todo muy muy turística, se ve que viven casi por completo del turismo de playa y del de las carreras de coches. Esta es la vista desde nuestro hotel. La ciudad tiene menos de 70 mil habitantes (casi la mitad de Alcobendas) pero recibe 8 millones de turistas al año.

Y volvemos a estar en un Wyndham, hemos hecho la reserva por Internet y de un día para otro sin ningún problema, que es algo que nunca habíamos hecho. El hotel se llama Wyndham Ocean Walk y nos ha sorprendido muchísimo por que no se parece para nada a los demás. Los hoteles estos son muy tranquilos y no tienen los servicios de otros hoteles, no tienen restaurantes, ni cafeterías, no tienen aparcacoches, ni siquiera botones. Pero este es un hotel de playa más, tiene de todo y mucho más.

De hecho tiene muchísima vida, tenía música en vivo en la recepción, dos bares en la piscina, una sala de yoga con cursos, gimnasio, un pequeño supermercado, un restaurante y una cafetería y no sé cuantas cosas más. Un hotel muy vivo.

Tambien está anexo a un centro de ocio con varias salas de cine, restaurantes, tiendas, etc.

La habitación no nos ha gustado mucho, el hotel estaba lleno y hemos reservado muy tarde, así que nos han dado «lo que tenían» y claro, malacostumbrados que no tienen a habitaciones enormes, pues claro, nos ha defraudado un poco, no tanto por el tamaño, sino por una cosa rarísima, que no he visto en mi vida ¡Las ventanas dan al pasillo! Tiene ventanas en el salón y el dormitorio, pero dan al pasillo de acceso a las habitaciones, así que te puede ver cualquiera, es verdad que los americanos no son nada cotillas, pero no me siento muy cómodo estando como un escaparate, así que hemos tenido que tener cerrado todo el tiempo, que corta un poco el rollo. Ya hemos visto que tipo de habitación tenemos que reservar la próxima vez que vengamos para que esto no nos pase.

El dormitorio me ha gustado mucho, era muy amplio y muy cómodo, más moderno que los demás hoteles que hemos estado.

Y el salón más pequeño, pero práctico, tampoco echabas nada en falta.


Y la cocina muy pequeña, dentro del salón, tenía lo mismo que los demás pero «aplastao» en una sola pared.

Y el hotel tiene 4 piscinas, dos exteriores y dos interiores, las dos de dentro y una de fuera climatizadas y la otra es un recorrido de estos de roscos que te sientas y te dejas llevar por la corriente. El hotel está en primera linea de playa.


Esta es la fachada a la playa del hotel.

Y una cosa que me ha llamado mucho la atención, que yo no había visto nunca, es este «limpiador de pies» cuando vuelves de la playa pisas ahí y te salen varios chorros de agua a presión que te quitan la arena en unos segundos.

Esta es una de las piscinas interiores, la vedad es que estaban de maravilla.

Y en la playa había un escenario, junto al hotel que hacen conciertos y espectáculos por las noches. Se nota que esta es una ciudad con muchísima vida.



Y las patrullas de los «Vigilantes de la Playa» de Daytona.

Y llegamos a la playa ¿Por qué es famosa esta playa? Pues es por que su arena tiene una peculiaridad. En realidad la marea sube y baja mucho, cuando la marea sube la playa prácticamente desaparece, no tiene apenas sitio donde puedas poner tu toalla a tomar el sol, por eso todos los hoteles tienen sus piscinas, la playa es poco más que una linea de 3 metros de ancho para pasear.
Todo esto que ves en las fotos aparece cuando la marea baja, entonces esa franja de tres metros se convierte en una de 50. La arena de esta playa es finísima y muy pesada, de modo que cuando baja la marea se compacta, pero se compacta como el cemento, tanto que vas andando y prácticamente no dejas huella, es como si andases sobre cemento, entonces los coches pueden circular por la playa como si fuera una carretera, si te fijas en la foto de debajo verás los coches a la izquierda.

Entonces hace años empezaron a hacer carreras de coches, durante más de 50 años se ha estado corriendo en la playa hasta que se construyó un circuito «real» para las competiciones. Este fenómeno de la arena han hecho de la playa de Daytona un lugar único en el mundo y un lugar para grandes concentraciones de amantes del motor, sobre todo para los motoristas.

Cambio de tema para contarte esta escena que nos pareció muy bonita, la chica en la silla de ruedas tenía una deficiencia psíquica, estaba allí en la playa dándole de comer a los pájaros, ponía la comida en su mano y las gaviotas iban a comer de ella, la chica estaba entusiasmada, además llegó un momento en que la rodearon por completo, era una imagen espectacular. De todos modos me quedo con la alegría que tenía la chica de tener a todos los pájaros a su alrededor.
Como te contaba, durante 50 años ha habido competiciones oficiales en la playa de Daytona, hasta que se decidió a construir un circuito de carreras de primera magnitud. En el circuito cabe casi tres veces toda la población de la ciudad, es un circuito oficial del NASCAR, algo parecido a nuestra Formula 1. Es un circuito espectacular, gigantesco. Aquí se celebran varias carreras de las más importantes que hay.
Esta es una ciudad del motor. Pero para nosotros sólo ha sido de playa. El turismo de playa antes era aquí más popular, pero ahora se están especializando más en el tema de carreras y velocidad y el turismo de sol se ha pasado más al oeste a la ciudad de Panama City.

Hoy ha sido un día muy tranquilo, hemos estado en la piscina, dando largos paseos por la playa, como no nos va demasiado todo el rollo de los coches, no hemos querido hacer ninguna de las visitas turísticas típicas de la ciudad, entre otras cosas por que queremos volver a ella con Cesar y Mari que son grandes amantes de los coches y mejor vemos todo con ellos. Así que nos ha servido la visita para descansar, sol, playa, piscina, relax… Y te dejo con mi foto favorita del día:

Hola chicos muasssssssssssssssss.
Esa ciudad sería un sueño para tu hermano estar en ella. Que bonita la playa, nosotros lo que conocemos de la ciudad, es precisamente el circuito donde se hace la copa Nascar, pero no me imaginaba que fuera tan bonita.
Decidido tenemos que explorarla a fondo los 4, que espero que sea en breve.
Muassssssssssssssssssssss enormes tenemos muchas ganas de veros, ciao.
y tu ¿qué opinas?