La Suite Presidencial

El viaje de Gifmania tenía que tener el mejor destino posible, nuestra casita en Miami y nuestra pseudo casita en Orlando. Somos socios de un Club de Vacaciones, que es tener un porcentaje de la propiedad de un hotel de la cadena Wyndham. Por eso la llamamos pseudo-nuestra, aunque nuestra propiedad aquí sea del tamaño de un azulejo…. es nuestro azulejo 🙂

Hemos querido dar una sorpresa a los chicos y hemos reservado una suite de unos 300 metros cuadrados, con tres habitaciones y terraza. Una suite presidencial, a todo lujo. Queremos que tengan las mejores vacaciones posibles y un hotel como este marca mucho la impresión que te llevas de un destino, aunque a Disney World no le hace falta.
Sus caras al entrar no tenían precio, sobre todo la de Mari, que se ha quedado con la boca abierta, además un botones ha sacado las maletas del coche y las ha subido a la habitación en un carrito, que esos detalles contribuyen más a que la experiencia sea más total. El hombre nos iba dejando las maletas mientras nosotros babeábamos por la habitación.

El salón tiene unos 80 metros cuadrados como poco, yo creo que cabe mi casa entera dentro del salón. Tiene una mesa de comedor, que Alex dice que es como la de «La Bella y la Bestia» para 8 personas, que caben perfectamente 12 y luego una zona de estar con tres sofás.

El mobiliario es muy elegante, muy clásico. Con unos elementos de primeras marcas, como el equipo de audio de Bose. Todo está totalmente equipado, desde el DVD, hasta un Dolby 5.1 para escucharlo. Tele gigante de plasma, varios teléfonos, etc.

La cocina está dentro del salón, con una barra americana separando el espacio. Una barra alta con taburetes que van a ser perfectos para los desayunos estos días. Frigorífico gigante de dos puertas, batidora, cafetera, tostadora, microondas, etc. La verdad es que excede con mucho lo que se encuentra en una suite de hotel, por muy de lujo que sea. Nosotros estamos tan alucinados como los niños.

La sensación de amplitud creo que es lo que más impresiona. Decía un antiguo anuncio de televisión que el verdadero lujo está en el espacio y un sitio como este lo demuestra. Cuando vamos de un cuarto a otro y tenemos que pasar por el salón tenemos la sensación «de que se tarda» en ir de un cuarto a otro, algo que no es normal en una casa que se llega enseguida. Nos tiene a todos impresionados.



La cocina es una chulada, porque es muy completa, pero a la vez muy sencilla, está todo muy recogidito, muy organizado y es muy practico. A mi personalmente lo de la barra americana me encanta para desayunar. Normalmente me pongo ahí para escribir el Blog, pero hoy me he puesto en la mesa grande del comedor, que es más cómoda.

Alex ha estado viendo el triturador de basuras. Que en la casa de Madrid si lo tenemos, pero en la de Miami no y no lo había visto en funcionamiento. Es un gran invento, ojalá fuese más fácil de poner en España, porque hace muy cómodas algunas tareas de la cocina.

Todos los detalles de la habitación estás cuidado al completo, hasta los trapos de la cocina están puesto así de bonitos.


Y tiene una pantalla interactiva que es una pasada, que sirve para saber todos los datos del hote, el tiempo en la zona, todas las actividades, hasta correo electrónico con el hotel y acceso a Internet. Es una pasada de pantalla, lo dicho, me la pido. 


Y este tan chulo es nuestro dormitorio, que es muy grande y es el que está junto a la cocina.


Este es el de Alejandro y Alex. Que son dos camas grandes, como las nuestras de matrimonio, pero una para cada uno.



Este es nuestro baño, con jacuzzi para dos personas. Cabina de ducha enorme, comodísima. Y el inodoro separado del baño, en otro cuartito, que eso tambien me gusta mucho, me parece muy cómodo.






Estamos en la plantal 13, así que las vistas son una chulada.
Y debajo el parque acuático de los piratas, a ver si tenemos tiempo estos días para bajar, que me parece a mi que con tanto parque, esta vez nos quedamos con ganas de estrenar bañador.

El hotel es una preciosidad, la Suite presidencial en la que estamos creo que va a contribuir mucho a que la experiencia global del viaje mejore sustancialmente, que es lo que queremos nosotros más, que tengan el mejor viaje posible, que sea una experiencia que no olviden nunca. Aunque espero que esto de los viajes de la empresa sea algo más habitual, se lo merecen y me gustaría que estuviesen los demás miembros del equipo.

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