Magic Kingdom

Es difícil contar el día que fuimos a Magic Kingdom, para empezar porque contar algo en pasado sin que parezca aburrido es difícil, en realidad fue un día que empezó con mucha ilusión y que a mitad del día, al recibir una llamada desde Madrid se rompió la magia y el día nublado se nos echó encima… cuento esto y empiezo así porque a partir de ese momento David y Mª Carmen no salen en las fotos, no tenían ganas, y aunque los demás tampoco teníamos muchas ganas, Pepi y Conchi estaban en Magic Kingdom, tenían que terminar de verlo y era su oportunidad, por otro lado, ni David ni yo, organizadores de todo el viaje, no queríamos que sobre Mª Carmen pesara también la «culpabilidad» (que en esos momentos era uno de los sentimientos que la abordaban) de que no pudieran disfrutar el parque.
Bueno, pues una vez aclarado ese punto, empiezo a contar la ilusión con la que llegábamos al parque. El día estaba nublado, pero nos dio igual, según nos acercábamos al aparcamiento de Magic Kingdom todo eran nervios y risas, al llegar al aparcamiento teníamos que coger un medio de transporte hasta el parque, teníamos dos opciones, barco o el famoso monorraíl que tanto le gusta a David.

Pepi dijo que como ella nunca se había montado en barco quería ir en el barco por el lago, porque no sabría cuando tendría otra oportunidad, y claro, todos dijimos a la vez, ¿y cuando te has montado en el monorraíl? risas y más risas, pero al final nos montamos en el barco desde el cual pudimos disfrutar de las vistas de los hoteles que están al lado del parque.Al entrar al parque mientras iban al baño me escape para pedir lo que ya es una tradición, la chapa de primera visita, no se lo esperaban, y aunque Mª Carmen y mi madre ya habían estado en Magic Kingdom, el aquel momento no sabíamos de la existencia de esas chapas así se las dimos ahora aunque no era verdad que fueran novatas.

Main Street les encanto, además, lo tienen bien montado, porque a primera hora de la mañana, cuando todos entran en masa al parque y todo el mundo tiene que pasar por esa zona del parque, que da acceso al resto, toda la ambientación del parque esta ahí, fotógrafos, cantantes, bailarines, con lo que el subidón de adrenalina y los nervios se disparan.

Empezamos montándonos en las atracciones más importantes que no se pueden dejar escapar, no había mucha gente en el parque así que apenas esperamos colas para montarnos.
A mitad de mañana el gusanillo, gusa, o simplemente antojo, hizo su aparición y ahí se fue Conchi a por palomitas para todos, las palomitas de Disney ya son una tradición entre David y yo, desde la primera vez que fuimos allá por el 2001, nunca ha fallado que no comamos siempre que hemos ido.

Sin duda, la atracción mas divertida fueron las tazas de Alicia, y no porque la atracción sea divertida en sí, sino porque Pepi las vio y se quería montar, ni David ni yo nos montamos porque algo que da tantas vueltas acaba por marearnos, mi madre y Mª Carmen, se habían tomado un café y no querían agitarlo demasiado, así que se montaron solas, ¿porque fue tan divertido? porque a pesar de la cara de velocidad que tenían las dos, no movieron la taza ni una sola vez, cuando lo divertido de esta atracción es que tu muevas tu taza para tener más velocidad…

Otro momento divertido fue cuando vimos a la madrastra de Cenicienta y sus hermanastras, que caras, Pepi como una más, se fue corriendo a hacerse una foto, lo gracioso es que algunos niños que estaban esperando no querían ni acercarse al ver la cara que ponían, eran muy buenas, la verdad es que daban miedo.

En Septiembre vimos una atracción que provoco de todos los sentimientos, dedicada a los presidentes de Estados Unidos, están todos los retratos y unos muñecos que son la réplica de los presidentes, claro, teníamos la curiosidad de ver cómo reaccionaba el parque porque fuimos el mismo día 5 de noviembre, justo después de las elecciones, nos preguntábamos si lo tendrían preparado, si tendrían dos muñecos y lo pondrían rápido… pero sorpresa, la atracción estaba cerraba, porque simplemente, la estaban remodelando… eso sí, felicitaban al nuevo presidente electo.

La comida en Magic Kingdom es ya un clásico, es el momento para comer un autentico perrito caliente americano, están deliciosos, así que cumplimos la tradición.

El resto del día fuimos de atracción en atracción para terminar de ver el parque e irnos descansar a lo que yo llamo en el tomtom, casita disney, fuimos a visitar a Minnie, pero no estaba en su casa, resulta que estaba con Mickey en una recepción que pudimos ir, y hacernos la foto.

Pepi cumplió la promesa que había hecho a sus nietos dando un beso a Mickey y otro a Minnie en su nombre hasta que ellos puedan venir a dárselo en persona.

El día terminó, al día siguiente se iban Mª Carmen y David a Miami para regresar a Madrid, así que por eso no hay mucho más que contar, fue un día de llamadas de teléfono, con solo un móvil que le quedaba poca batería y que había que resolver muchos cabos sueltos, pero bueno, el día termino y más o menos dormimos algo.

Dando un salto en el tiempo cuento una cosa que está sucediendo ahora mismo, las chicas se están haciendo fotos en la terraza, posando en las butacas, como mi niño se lo está perdiendo le mando esta foto para que se acuerde de las vistas de su casita miamense.

¿Te ha gustado la entrada? ¡Vota!

Experiencias relacionadas

5 Opiniones

  1. Anónimo
  2. Anónimo
  3. Anónimo

y tu ¿qué opinas?